

QUIÉNES SOMOS
Incorporando de la sabiduría ancestral a través de la fusión cultural y el espíritu de resitencia
Nuestro Kalpulli se define con orgullo como una sincronización entre cultura y tradición, que define una profunda comprensión de las historias de nuestros antepasados. Honramos el legado de nuestros ancestros combinando las tradiciones culturales con la expresión contemporánea, creando una fusión dinámica que resuena tanto en el pasado como en el presente.
Una parte esencial de nuestra identidad es el reconocimiento de las luchas a las que se enfrentaron nuestros abuelos y abuelas, que se enfrentaron a la represión de las fuerzas religiosas mientras defendían firmemente sus tradiciones. A pesar de los retos impuestos por la colonización, integraron ingeniosamente sus creencias con los santos venerados por la religión dominante. Tras el velo de la conformidad externa, mantuvieron una profunda conexión con la energía mexica dentro de las cuentas agrícolas y religiosas, reconociendo sus raíces espirituales y su herencia ancestral.
A través de nuestra danza, rendimos homenaje a esta resistencia e ingenio, tejiendo hilos de espiritualidad, orgullo cultural y sabiduría ancestral. Al movernos en armonía con los ritmos de nuestras tradiciones, honramos el espíritu perdurable de nuestros antepasados, encarnando su legado con cada paso y cada gesto. Al hacerlo, afirmamos nuestro compromiso de preservar y revitalizar nuestro patrimonio cultural, garantizando que las historias de nuestros antepasados sigan inspirándonos y guiándonos en el mundo moderno.


NUESTRA HISTORIA

Cultivando la tradición y la curación en la comunidad mediante la guia ancestral
Kalpulli Tlaloctecuhtli, establecido en marzo de 2019, surgió del liderazgo visionario de Carlos Ramos, reforzado por los esfuerzos de colaboración de Diego Guaman, Oscar Ramos, Tannya Urquiza, Dulce Ruiz y Alicia Rivera. Arraigado en las tradiciones ancestrales del pueblo Mexica-Anahuac, el grupo emprendió su viaje en los confines del sótano de la casa de la familia Contreras en Saint Paul.
Carlos Ramos tuvo la idea de Kalpulli Tlaloctecuhtli con un doble propósito: cultivar espacios seguros para los jóvenes, especialmente los que se identifican como dos espíritus or LGBTQ+, y guardar las costumbres tradicionales. Sus encuentros personales con la escasez de tales espacios le impulsaron a construir una comunidad donde el legado cultural y la sanación individual pudieran cruzarse armoniosamente.
Carlos Ramos, Diego Guamán, Lucía Dávila y Carlos Gutiérrez surgieron como defensores incondicionales de la misión de Tlaloctecuhtli. Carlos Ramos, como jefe del Kalpulli, nos guía por el camino del aprendizaje y la iluminación.
Diego, aprovechando sus conocimientos de medicina tradicional, asume un papel fundamental en el fomento de las prácticas curativas dentro del colectivo. Lucía, a la que se ha confiado el manto de guardiana del fuego, orquesta hábilmente el equilibrio y la ejecución de los programas del Kalpulli. Mientras tanto, Carlos Gutiérrez, como bandero o portador del caracol, armoniza expertamente las vibraciones energéticas del grupo.
Nuestro compromiso de crear espacios sagrados para la sanación comunitaria no se ha visto mermado por el rotundo apoyo que hemos recibido, lo que subraya nuestra firme dedicación. Con nuestros esfuerzos, nos esforzamos no sólo por salvaguardar nuestro patrimonio cultural, sino también por fomentar un clima de inclusión y sanación para todos los miembros de nuestra comunidad.
